¿Qué hacer durante una escala de crucero en Lanzarote?

Patricia | 21/10/2019

Lanzarote es una escala destacada en los cruceros que pasan por las Islas Canarias antes de cruzar el Océano Atlántico en dirección al Caribe. En esta “isla de fuego” que mezcla mar y lava, los barcos de las principales compañías de cruceros habitualmente hacen escala en el puerto de la encantadora ciudad de Arrecife, capital de la isla. Desde esta ciudad, los pasajeros de los barcos de crucero tienen a su disposición numerosas opciones de visita. Por ejemplo:

Descubrir el Parque Nacional de Timanfaya

El Parque Nacional de Timanfaya es un suntuoso ejemplo de los orígenes volcánicos de Lanzarote. Los consolidados y negros flujos de lava cubren este inmenso lugar de más de 800 km² en el que cientos de cráteres completan el impresionante paisaje. Este campo de lava está atravesado por una carretera asfaltada, de unos quince kilómetros de longitud, que los autobuses utilizan para realizar las visitas. Durante la excursión, numerosas sorpresas esperan a los visitantes, por ejemplo, podrán crear un géiser vertiendo agua en un agujero en el suelo o degustar diversos platos que se cocinan enterrados en el suelo. Este parque también incluye una encantadora localidad, El Golfo. Este pueblo de pescadores es famoso por sus restaurantes de pescado y por la verde Laguna de Charco Verde, enclavada entre acantilados y una playa negra. El Parque de Timanfaya está en el oeste de la isla, a media hora en coche del puerto de Arrecife.

Degustar el vino de La Geria

El valle vinícola de La Geria está situado al sur del Parque de Timanfaya. En esta zona de Lanzarote, el suelo, abonado con cenizas volcánicas, ha permitido y favorecido la plantación de las viñas. Pero en La Geria, esta labor se realiza de una manera completamente diferente. La cepa se planta en medio de una baja pared semicircular, conocida como “zoco” que sirve para proteger la planta. El resultado es un panorama único en el mundo. Quienes desean degustar el vino de estos extraordinarios viñedos pueden hacer una parada en los “taros”, las cabañas de los viticultores, o en alguna bodega de la carretera que une Mozaga y Uga. Aquellos que dispongan de suficiente tiempo, deberían acercarse al centro de la isla donde se encuentra la bodega más antigua de las Islas Canarias, la Bodega El Grifo, fundada a principios de la década de 1.770. Esta visita brinda la oportunidad de degustar una especialidad local, el mojo, una salsa picante roja o verde que se elabora con aceite de oliva, comino, pimentón, azafrán y tomate. Dicha salsa, a menudo, se acompaña simplemente con patatas asadas.

Visitar las Salinas de Janubio

En el extremo sur del Parque de Timanfaya hay otro atractivo que, con las excursiones propuestas por la compañía MSC Cruceros, se puede descubrir durante una escala de crucero en Lanzarote, las Salinas de Janubio. El lugar antiguamente albergó un puerto pero, después de las erupciones volcánicas, se formó una playa que originó la formación de la laguna actual en cuyo borde se encuentran las salinas. Además de un paseo por estas salinas, otra actividad muy popular aquí es  la observación de aves. De hecho, la laguna es  una reserva ornitológica en la que se detienen numerosas aves migratorias. Siguiendo el camino al sur de Janubio, en el extremo sur de Lanzarote, no hay nada mejor que disfrutar de un relajante descanso en la Playa de Papagayo, una de las más famosas de la isla.

Seguir los pasos de César Manrique

César Manrique fue un célebre pintor, escultor y arquitecto nacido en Lanzarote que, además, se alzó como destacado defensor de la naturaleza única de su isla natal. De su lucha nació el camino que lleva su nombre y que, en Lanzarote, permite a los visitantes acceder a sus grandes obras. Este tour incluye el Mirador del Río, en el extremo norte de la isla, y los Jameos del Agua, cuevas naturales que también se utilizan como sala de conciertos. El Jardín de Cactus es otro lugar destacado de este recorrido pues, en el pueblo de Guatiza, enumera cerca de mil especies de Cactus. Para conocer más sobre este artista, es recomendable hacer una visita a la Fundación César Manrique, donde se recogen otras obras de Manrique y, también, pinturas de Picasso.

Visitar Arrecife

Antes de embarcar de nuevo en el crucero para continuar el viaje, es aconsejable realizar un tour por Arrecife. Ubicado en el norte de la ciudad, el Castillo San José es realmente inconfundible. Construido en el siglo XVIII, está a un paso del puerto y, en la actualidad, alberga un museo internacional de arte contemporáneo. Otro fuerte por descubrir es el Castillo de San Gabriel, que se asienta en un islote y fue construido para proteger la ciudad de los ataques que llegaban por mar. Hoy en día, en este castillo se encuentra el Museo Arqueológico y Etnológico. El puente levadizo del Puente de Las Bolas es otro monumento importante de Arrecife.